La práctica

La práctica es ponerse a disposición del cuerpo y dejar que la estructura se apacigüe por la intensidad de la escucha y de la sensorialidad. El cuerpo táctil despierta en la práctica y participa en la disolución del cuerpo esquemático y condicionado. Entonces el cerebro se vuelve silencioso, sensible, vivo e inmóvil como un cocodrilo en la orilla: ni anticipación ni memoria; calma sin principio y sin fin; silencio ardiente de vida. Eric Baret

  • 28 enero 2019

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