Luna Llena en Virgo

Plenilunio es la oposición Sol Luna. El Sol, la conciencia, desde Piscis, ilumina a la Luna, base emocional, en Virgo. En esta Luna se cosecha lo sembrado en septiembre durante la luna Nueva. Un proceso emocional culmina, coincidiendo con el cierre del año astrológico. Se siente el cansancio de los finales y cierta ansiedad por el ciclo que está por comenzar con el equinoccio. Piscis/Virgo es el eje de la existencia y del servicio. Se lo asocia a la polaridad caos/orden. Como toda polaridad, muestra dos lados de la misma realidad. El orden virginiano es sistémico, detallista, meticuloso. El orden pisciano es trascendente, superior y multidimensional. La distorsión de Virgo es el perfeccionismo y la obsesión. La distorsión de Piscis es la evasión de la realidad, las adicciones y la pérdida de los bordes del yo. Es un cielo con mucha energía transpersonal. Los planetas están directos en Acuario y Piscis. Plutón recorre los últimos grados de Capricornio demoliendo los vestigios de las viejas estructuras. El Stellium en Piscis da confusión, laxitud y falta de energía. Hay una gran conexión con lo sutil a través de la actividad onírica, la imaginación y la intuición. Son días de extrema sensibilidad y resonancia. La ausencia de planetas en Fuego se equilibra activando el cuerpo. El movimiento ayuda a bajar a tierra los estados de ensoñación y bruma. Marte Conjunción Venus en Acuario vibran autenticidad, libertad, desapego y re evolución. La vivencia de amor y deseo mutó. Parecen decir: “Lo que era ya no es ni será”. El pulso del deseo trae el eco de lo colectivo al paisaje íntimo. La vincularidad e interconexión es vivencia ineludible. Saturno en Acuario propicia la construcción de estructuras horizontales y en red. Venus cuadratura Urano puede expresarse con cambios bruscos en relaciones, valores y recursos. Disrupciones, cortes, movimientos inesperados en cuanto a estos temas. Mercurio Conjunción Júpiter en Piscis es la unión de la mente horizontal y la mente vertical. Análisis y síntesis. Concepto y metáfora. El sextil con Urano despliega la creatividad ilimitadamente. Virgo activa el discernimiento y ayuda a poner orden en el caos pisciano. Reconocernos sistemas dentro de sistemas es el modo Virgo de traducir el Uno. Invita a reconocer el propio cuerpo como espacio sagrado y a iniciar nuevos hábitos y rutinas saludables. Prestar atención a los detalles, iniciar cambios y cultivar la autodisciplina Virgo busca la integridad del cuerpo, portal de una espiritualidad encarnada. El Trígono entre la Luna y Plutón promueve un orden en las emociones más intensas y profundas. Sale a la luz lo que estaba escondido. No es simple catarsis. Se siente la necesidad de que el dolor emocional sirva para algo, sea útil. Las cualidades virginianas están al servicio de un orden superior. El sextil Sol Plutón refuerza e ilumina lo anterior. Invita a Integrar, incorporar, “hacer cuerpo” el potencial emocional. Encauzarlo sin desbordes hacia acciones concretas. Piscis es la fase final del zodíaco, la disolución de los once signos anteriores. Se asocia a los estados expandidos de conciencia. También a los estados alterados. En el océano pisciano está todo, sin juicios de valor. Negar los monstruos de las profundidades e identificarnos con los peces de colores, nos polariza y alimenta la proyección de la sombra en el otrx, en los otrxs. El caos pide ser integrado. Y esta Luna favorece el proceso alquímico. Cito para inspirarnos a dos científicos de las ciencias duras: Ilya Prigogine y Edward Laurenz: “El caos posibilita la vida y la inteligencia” “Llamamos caos al orden que todavía no comprendemos” Buena Luna para todxs 🌼 CD marzo 2022 Imagen: Julie Paschkis